Gracias a la ayuda de Tomáš Nosk, los jugadores de hockey de Boston derrotaron a Detroit 3:2 y lograron su quincuagésima victoria en la temporada de la NHL. Les tomó 64 juegos, que es un nuevo récord de la liga en el extranjero.
El máximo hasta ahora era de 66 partidos, que necesitaron los Red Wings en la temporada 1995/96 y también Tampa Bay en la 2018/19 para alcanzar la meta de ronda.
Los Bruins dieron un gran giro después de que no pudieron manejar la situación en los primeros cinco minutos con un número impar de jugadores en el hielo. Primero, recibieron un gol de Andrew Copp en su propio juego de poder, luego encajaron después de un disparo débil de Alex Chiasson.
Los soberanos de la competición empataron en el segundo tiempo gracias a Hampus Lindholm y al capitán Patrice Bergeron en 88 segundos. En el minuto 54, Garnet Hathaway marcó desde el punto de penalti tras una acción en la que también participó Nosek. Boston volvió a su racha ganadora después de la derrota del jueves ante Edmonton, que puso fin a su racha de 10 victorias consecutivas.
Tras tres partidos en los que marcó, David Pastrňák, el checo más productivo de la competición, se quedó sin un punto. Tampoco los compañeros David Krejčí y Pavel Zacha, ni David Kubalík o Filip Zadina con la camiseta del rival.
Boston-Detroit 3:2 (0:2, 2:0, 1:0)
Goles: 33. Lindholm, 35. Bergeron, 54. Hathaway (Nariz) – 2. Copp, 5. Chiasson. Tiros a puerta: 38:32. Espectadores: 17.850. Estrellas del juego: 1. Hathaway, 2. Ullmark, 3. McAvoy (todo Boston)