a menudo elunión Europea se ve obligado a posponer decisiones sobre temas cruciales, mientras que sobre asuntos de menor prioridad parece adoptar una actitud más fuerte y decisiva. Es una pena, sin embargo, que en muchas ocasiones decidas sacrificar la comodidad y las necesidades diarias en nombre de las elecciones ecológicas. Un ejemplo de ello es una de las últimas propuestas de la Comisión Europea, que quiere dejar de lado el llamado prospecto en los envases de drogas estamos acostumbrados – útil para proporcionar información al cliente – en el contexto de una reforma digital.
La idea sería sustituir al clásico. folleto con un código QR para enmarcar y leer con tu smartphone. Así lo informó el diario español El país. ¿La intención de tal movimiento? Reduzca el uso de papel y, en consecuencia, ahorre costos. Sin embargo, la innovación verde presentaría no pocos problemas y tendría un impacto considerable, especialmente en el personas de edad avanzadaque en gran medida recurren al uso de drogas y que en muchos casos no tienen una relación fiel con la tecnología.
Por eso se cuestionaría la utilidad de tal decisión: laliteratura y la familiaridad digital de un anciano no se puede comparar en absoluto con la de un joven. Sin embargo, el prospecto juega un papel muy importante: es una verdadera guía indispensable para el uso de un medicamento que enumera toda la información útil que debe saber antes y durante la toma de un medicamento en particular, desde la dosis hasta las contraindicaciones.
El maxi reforma de la legislación farmacéutica que está preparando la Comisión Europea tiene el objetivo de mejorar el acceso de los pacientes a los medicamentos, pero al hacerlo corremos el riesgo de poner obstáculos a las personas mayores. Digitalizar el texto informativo de un fármaco podría complicar significativamente el acceso a las personas mayores. Hay que decir que al menos hay una luz de esperanza: el proyecto prevé que los países decidan los métodos y el momento de este paso, teniendo en cuenta los diferentes niveles de desarrollo digital de los estados miembros.
Podría adoptarse un compromiso siguiendo el ejemplo de Españao eliminando la tarjeta solo para medicamentos a uso hospitalario que son administrados por profesionales de la salud. Fuentes de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) explican que esta opción es actualmente la preferida, aunque se especifica que hay que tener en cuenta que la reforma legislativa europea podría tardar más de un año en aprobarse.