El ministro de Vivienda, Vincent Jeanbrun, advirtió el pasado sábado en una entrevista al «Parisien»: “Si el proyecto de ley de finanzas para el próximo año no es votado por los parlamentarios, el dispositivo MaPrimeRénov’ se suspenderá inevitablemente a partir del 1 de enero. Como ya ocurrió a principios de 2025. El dispositivo se vio congelado durante semanas, provocando el bloqueo de decenas de miles de expedientes”.
Tras el fracaso, este viernes, de los diputados y senadores de la comisión mixta paritaria a la hora de alcanzar un acuerdo sobre el presupuesto de 2026, este escenario es ahora el más probable. Un duro golpe tanto para los hogares que esperaban ayuda para iniciar rápidamente trabajos de renovación energética en sus apartamentos o casas, como para los profesionales del sector, que denuncian constantemente los “paros y arranques” en la política de renovación energética.
«Ambición debilitada»
Reunidos en la Alianza para la Vivienda, estos últimos reaccionaron rápidamente el viernes, lamentando que “la incapacidad de los parlamentarios para llegar a un acuerdo […] debilite la ambición en materia de renovación energética”. También lamentaron la ausencia de un estatus fiscal para los propietarios privados (presente en el proyecto de presupuesto que no prosperó), que se suponía que relanzaría la inversión en alquiler en el sector inmobiliario residencial. “Paralelamente, se caen los acuerdos alcanzados en favor de la vivienda social”, expresaron con pesar.
En lo que respecta a MaPrimeRénov’, los hogares tienen dificultades para entenderlo, debido a los numerosos cambios en las condiciones de acceso en los últimos años. Este verano, el gobierno suspendió, del 23 de junio al 30 de septiembre, las ayudas para las renovaciones integrales, que permiten una mejora de al menos dos clases energéticas en el DPE (Diagnóstico de Rendimiento Energético). Esto se debió a la afluencia de expedientes a la Anah (Agencia Nacional de la Vivienda), que concede esta subvención, y a los numerosos casos de fraude.
Nuevo retraso
Para empeorar las cosas, a la reapertura del sistema, un problema técnico en la plataforma bloqueó el registro de expedientes durante tres días. El ejecutivo también limitó a un máximo de 13.000 el número de expedientes que podrían financiarse antes de fin de año, dando prioridad a los hogares con menos recursos.
En enero, se suponía que el sistema volvería a abrirse a todos para estas renovaciones de alto rendimiento. Ahora se perfila un nuevo retraso. Si no hay contratiempos, el gobierno aspiraba a 120.000 renovaciones integrales en 2026, en comparación con las 103.000 de 2025. En ausencia de presupuesto, las ayudas para las renovaciones denominadas “por acción” –que consisten, por ejemplo, en cambiar únicamente el sistema de calefacción o simplemente aislar el tejado– también se bloquearán a partir del 1 de enero.
