El mundo de la música está de luto por el fallecimiento de Chris Rea, el aclamado cantautor británico, a los 74 años. Según informó su familia, el artista murió tras una corta enfermedad.
La carrera musical de Rea sufrió un duro revés a los 33 años, cuando le diagnosticaron cáncer de páncreas. Posteriormente, tuvo que someterse a la extirpación de parte de su páncreas, duodeno, vesícula biliar y parte de su hígado. Además, padecía diabetes tipo 1 y problemas renales.
A pesar de los desafíos de salud, Rea demostró una increíble resiliencia. En 2016, sufrió un derrame cerebral, pero se recuperó lo suficiente como para grabar y realizar una gira con su 24º álbum, “Road Songs for Lovers”. Un año después, preocupó a sus fans al colapsar durante una actuación, aunque afortunadamente se estabilizó en el hospital.
En una entrevista en 2020, durante su participación en el programa “Gone Fishing” con Bob Mortimer y Paul Whitehouse, Rea repasó la lista de procedimientos médicos a los que se había sometido en 1994, año que irónicamente describió como su “año más exitoso”. “Nunca me he recuperado del todo”, confesó, añadiendo que tomaba “34 pastillas cada día” para controlar su salud.
Rea también habló abiertamente sobre su enfermedad, afirmando que no le tenía miedo a la muerte. De hecho, utilizó sus batallas contra la enfermedad como inspiración para volver a sus raíces musicales: el blues. “Parecía el final, pero lo que me ayudó a seguir adelante fue la idea de dejar un disco que mis dos hijas adolescentes pudieran decir: ‘Eso es lo que hacía papá, no las canciones pop, sino música blues. Eso era lo que le importaba'”, reveló.
