Lo primero que llama la atención es, sin duda, el llamativo sombrero de vaquero rojo que corona la estructura. Originalmente no estaba presente. Según cuentan los lugareños, tras la construcción de una torre ligeramente más alta en la rival ciudad de Paris, Tennessee, los tejanos hicieron lo que mejor saben hacer: añadieron un sombrero y declararon la victoria.
Con este adorno, la torre alcanza los 65 pies de altura, asegurándose orgullosamente el título de segunda torre Eiffel más alta en una ciudad llamada Paris. (La original francesa supera los 1.000 pies, unas 16 veces más, por lo que el primer puesto estaba fuera de alcance.)
De cerca, podría recordarle a una antena de radio con aspiraciones artísticas, pero la atmósfera es puramente la de un picnic parisino. Familias descansando sobre el césped, niños mirando hacia arriba y parejas besándose bajo sus vigas de acero, como si las aguas del Sena fluyeran cerca.
Si se encuentra en el noreste de Texas, merece la pena desviarse para visitarla. Y recuerde: en Paris (Texas), el código de vestimenta es informal vaquero.
