Al menos 24 ataques contra instalaciones de refinación de petróleo rusas, buques tanque, otros objetivos marítimos e infraestructura de oleoductos clave se han registrado en el último mes, según datos recopilados por agencias de noticias.
Ucrania ha intensificado particularmente sus ataques contra la infraestructura marítima. Entre los objetivos se encuentran ataques repetidos contra los campos petroleros y de gas de Lukoil en el Mar Caspio, así como ataques contra los puertos de Taman y Rostov en el Mar Negro, donde se produjeron incendios en varios buques tanque. Además, Ucrania ha continuado sus ataques contra la denominada “flota sombra” rusa.
El gobierno ruso prevé que los ingresos por petróleo y gas representen solo alrededor del 23% de los ingresos del presupuesto estatal el próximo año, lo que sería un mínimo histórico, según informa el artículo.
Recientemente, las fuerzas armadas ucranianas atacaron la planta de productos petrolíferos de Novoshakhtinsk en la región de Rostov utilizando misiles de crucero Storm Shadow de lanzamiento aéreo.
Esta planta es uno de los mayores proveedores de productos petrolíferos en el sur de Rusia y participa en el suministro a las fuerzas de ocupación.
El 25 de diciembre, drones de largo alcance también atacaron depósitos de petróleo en el puerto marítimo de Temriuk en el Krai de Krasnodar.
