Una nueva estrategia investigada busca reducir la densidad de los tumores cancerosos y, al mismo tiempo, aumentar la eficacia del tratamiento. Este enfoque innovador podría mejorar significativamente los resultados para los pacientes oncológicos.
La investigación se centra en modificar la estructura interna de los tumores para hacerlos más susceptibles a las terapias convencionales, como la quimioterapia y la radioterapia. Al disminuir la densidad tumoral, se facilita la penetración de los fármacos y la radiación, lo que permite una mayor destrucción de las células cancerosas.
Aunque los detalles específicos de la investigación no se especifican, el objetivo principal es optimizar la respuesta al tratamiento y minimizar los efectos secundarios en los pacientes. Se espera que esta nueva aproximación contribuya a un manejo más efectivo del cáncer y a una mejor calidad de vida para quienes padecen esta enfermedad.
