Un conductor de 63 años fue detenido por la policía en Grafing durante un control de tráfico el viernes por la noche. El incidente ocurrió alrededor de las 23:40 horas, cuando los agentes percibieron un fuerte olor a alcohol proveniente del vehículo. Las pruebas realizadas indicaron una concentración de alcohol en sangre ligeramente por debajo del límite legal para considerar la conducción absolutamente imprudente, que se sitúa en 1,1 por mil.
La policía prohibió al conductor continuar su trayecto y confiscó las llaves del automóvil. Se ha presentado una denuncia contra el hombre, quien podría enfrentarse a un mes de suspensión de carnet y una multa considerable.
