Estados Unidos prohibió la venta de nuevos drones fabricados en el extranjero, una medida que ha generado una fuerte reacción por parte de China, que acusa a Washington de “supresión irrazonable” de sus empresas.
La decisión de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) impedirá que drones de fabricantes chinos como DJI y Autel ingresen al mercado estadounidense, donde tienen una presencia significativa. La FCC aclaró que la prohibición no afecta a los modelos de dispositivos que ya habían sido autorizados previamente.
Esta restricción se basa en una revisión de la FCC que determinó que todos los drones y sus componentes críticos producidos en el extranjero representan “riesgos inaceptables para la seguridad nacional de Estados Unidos y para la seguridad de sus ciudadanos”.
Uncommon Knowledge: MAGA’s Chinese Drone Ban Risks Backfiring
Lin Jian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, declaró en una conferencia de prensa el martes que China “se opone firmemente a la extensión excesiva del concepto de seguridad nacional por parte de Estados Unidos, la creación de listas discriminatorias y la supresión irrazonable de empresas chinas”, según informó la agencia estatal Xinhua.
“Estados Unidos debería corregir sus prácticas erróneas y proporcionar un entorno justo, equitativo y no discriminatorio para que las empresas chinas operen”, añadió Jian.
Brendan Carr, presidente de la FCC, afirmó que la agencia trabajará en estrecha colaboración con los fabricantes de drones estadounidenses para “desatar el dominio estadounidense” en este sector, en una estrategia que recuerda las restricciones comerciales implementadas por la administración Trump para proteger a los productores nacionales y revitalizar el sector manufacturero.
El Congreso había alertado sobre los drones chinos ante la proximidad de grandes eventos
Un año antes, el Congreso estadounidense aprobó una ley de defensa que expresaba preocupación por la seguridad nacional en relación con los drones fabricados en China, ampliamente utilizados en agricultura, cartografía, aplicación de la ley y cinematografía en todo el país.
La ley instaba a impedir que las dos empresas chinas continuaran vendiendo nuevos drones en Estados Unidos si una revisión determinaba que representaban un riesgo para la seguridad nacional estadounidense. El plazo para esta revisión era el 23 de diciembre.
La FCC mencionó la celebración de eventos importantes como la Copa Mundial de la FIFA 2026, las celebraciones del 250 aniversario de Estados Unidos y los Juegos Olímpicos de Verano de Los Ángeles 2028 como razones para abordar las posibles amenazas que representan los drones por parte de “delincuentes, actores extranjeros hostiles y terroristas”.
Reacciones de los fabricantes de drones en Estados Unidos y China
Michael Robbins, presidente y director ejecutivo de AUVSI, la Asociación para Sistemas de Vehículos No Tripulados, declaró en un comunicado que el grupo industrial acoge con satisfacción la decisión. Robbins señaló que ha llegado el momento de que Estados Unidos no solo reduzca su dependencia de China, sino que también desarrolle su propia capacidad de fabricación de drones.
“La historia reciente subraya la necesidad de que Estados Unidos aumente la producción nacional de drones y asegure sus cadenas de suministro”, afirmó Robbins, citando la disposición de Pekín a restringir el suministro de materiales críticos como los imanes de tierras raras para servir a sus intereses estratégicos.
DJI expresó su decepción por la decisión de la FCC. “Si bien DJI no fue señalada específicamente, no se ha publicado información sobre qué datos fueron utilizados por el Poder Ejecutivo para llegar a esta determinación”, señaló la empresa en un comunicado.
“Las preocupaciones sobre la seguridad de los datos de DJI no se basan en evidencia y, en cambio, reflejan proteccionismo, lo que va en contra de los principios de un mercado abierto”, añadió la compañía.
Este artículo incluye información de The Associated Press.
