La gripe en España muestra una lenta disminución, según el último informe del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), el organismo nacional de salud pública. Sin embargo, esta tendencia positiva no se extiende a todos los grupos de edad, ya que se ha observado un aumento de los contagios entre los mayores de 60 años, lo que ha generado una mayor atención por parte de los profesionales sanitarios.
Durante la semana del 15 al 21 de diciembre, el número total de casos de gripe en España experimentó una ligera bajada. La incidencia por cada 100.000 habitantes pasó de 197,6 a 192,6, lo que sugiere que la ola de gripe podría haber alcanzado su punto máximo. En varias comunidades autónomas, como Cataluña, el País Vasco y Galicia, la situación se mantiene estable o incluso ha mejorado.
Los expertos señalan que estas cifras representan un promedio nacional, por lo que la situación puede variar según la región y el grupo de edad. Por este motivo, es importante seguir de cerca la evolución de los datos en cada grupo poblacional.
Aumento de contagios en mayores de 60 años
En personas de 60 años o más, se observa una tendencia contraria. El número de casos de gripe ha aumentado notablemente en el grupo de edad comprendido entre los 60 y 69 años. También se ha registrado un incremento de las infecciones entre los mayores de 70 y 79 años, y aunque en los mayores de 80 años el aumento es menor, la línea sigue siendo ascendente.
Si bien los adultos mayores suelen contraer la gripe con menos frecuencia que los jóvenes, las consecuencias suelen ser más graves, con un mayor riesgo de complicaciones como neumonía y un período de recuperación más prolongado.
Hospitalizaciones estables
El número de personas hospitalizadas a causa de la gripe se ha mantenido relativamente estable. Se ha observado un ligero aumento en los casos de personas mayores y niños pequeños, mientras que otros grupos de edad han experimentado una disminución en las hospitalizaciones. Alrededor de uno de cada cinco pacientes hospitalizados desarrolla neumonía, y en algunos casos se requiere atención intensiva, lo que subraya que la gripe no es una enfermedad inofensiva, especialmente para las personas vulnerables.
Síntomas más comunes de la gripe
Los síntomas más frecuentes de la gripe son tos, fiebre, dolor de garganta, congestión nasal y malestar general. Estos síntomas se presentan en casi todos los grupos de edad, aunque en los adultos mayores tienden a durar más tiempo y a ser más severos.
Señal positiva con cautela
La disminución del número total de casos de gripe es una señal alentadora. Sin embargo, los expertos advierten que la situación puede cambiar rápidamente, especialmente durante las fiestas navideñas, cuando aumenta la interacción social. Por lo tanto, se recomienda mantener la precaución, especialmente entre los adultos mayores y las personas con problemas de salud.
Las autoridades sanitarias aconsejan mantener una buena higiene, como lavarse las manos con frecuencia y evitar el contacto cercano con personas que presenten síntomas. La vacunación sigue siendo una herramienta importante para prevenir complicaciones graves de la gripe en los grupos de riesgo.
