Nuevo Laredo, Tamps.— La crisis que enfrenta el sector del autotransporte de carga en la frontera norte se ha complicado aún más para los conductores, debido al incremento significativo en el costo de la licencia federal de conducir. El precio total de este trámite puede llegar a los 21 mil pesos, amenazando la estabilidad laboral de miles de choferes.
Lo que antes era un simple proceso administrativo, ahora representa una fuerte carga financiera. El proceso, que comienza con la evaluación médica realizada por “terceros autorizados” por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), es actualmente el gasto más elevado para los operadores.
El costo de la salud, el principal obstáculo
Según testimonios de operadores en Nuevo Laredo, el desglose de costos es alarmante:
- Examen médico (clínicas privadas): Hasta 14,000 pesos.
- Derechos ante la SICT: Alrededor de 7,000 pesos.
Esta situación se originó hace tres años, cuando la saturación en las delegaciones federales obligó a la SICT a contratar clínicas privadas para realizar los exámenes médicos. Los transportistas denuncian que estas clínicas justifican sus tarifas elevadas argumentando que la autoridad federal ha limitado el número de citas disponibles.
Escasez de conductores y problemas operativos
El alto costo y la burocracia están exacerbando la falta de operadores en el sector. A la carga económica se suma la insuficiente infraestructura y personal en la SICT, lo que retrasa la emisión de las licencias y deja a muchos conductores en una situación irregular o desempleados temporalmente.
” “Es un verdadero calvario. Entre la falta de carga y lo que nos cobran por el examen médico, estamos al borde de perder nuestra fuente de trabajo”, lamentó un transportista afectado.
Un sector en busca de soluciones
Los transportistas de Tamaulipas solicitan a las autoridades federales que regulen los precios de los terceros autorizados y fortalezcan la capacidad de atención en los módulos de medicina preventiva. Consideran que la estructura de costos actual es insostenible, especialmente en el contexto económico actual del comercio exterior en la región.
