Tras un nuevo retraso en la finalización del acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva ha instado a los europeos a demostrar mayor coraje y voluntad política. “Desafortunadamente, Europa aún no ha tomado una decisión. Los jefes de Estado y de Gobierno europeos han solicitado más tiempo para adoptar medidas adicionales para proteger la agricultura”, declaró Lula durante la cumbre de Mercosur celebrada en Foz do Iguaçu, Brasil.
“Sin la voluntad política y el coraje de los jefes de Estado y de Gobierno, no será posible concluir las negociaciones que llevan 26 años en curso”, enfatizó el líder político brasileño. El actual presidente del bloque comercial sudamericano había lanzado un ultimátum a la UE el pasado jueves. “Si no lo hacemos ahora, Brasil no llegará a un acuerdo mientras yo sea presidente”, afirmó en una reunión gubernamental, aunque posteriormente matizó esta postura.
Lula: Meloni estaría dispuesta a firmar en enero
Lula informó que mantuvo una conversación telefónica con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien le aseguró que estaría dispuesta a firmar a principios de enero. “El acuerdo se cerrará y espero que quizás se firme en el primer mes de la presidencia de Paraguay, por mi colega Santiago Peña”, añadió Lula, refiriéndose a su homólogo paraguayo.
Originalmente, el acuerdo debía firmarse el sábado durante la cumbre de Mercosur. Sin embargo, la jefa del gobierno italiano, Meloni, comunicó recientemente que aún no está preparada para aprobar el acuerdo propuesto con los cuatro estados miembros de Mercosur: Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay. Esto significó que no se alcanzaría la mayoría necesaria en la UE para la firma.
Austria también sigue rechazando el acuerdo. El canciller federal Christian Stocker (ÖVP) se siente vinculado por una resolución parlamentaria de hace seis años en contra de Mercosur, respaldada por todos los partidos parlamentarios de la época, excepto NEOS. No obstante, en una sesión del consejo municipal de Viena el pasado viernes por la noche, tanto el SPÖ como el ÖVP votaron a favor de la conclusión del acuerdo.
Según la Comisión Europea, la nueva zona de libre comercio, con más de 700 millones de habitantes, sería la más grande del mundo en su tipo y también serviría como una señal contra la política comercial proteccionista del presidente estadounidense Donald Trump. El plan es eliminar en gran medida los aranceles y las barreras comerciales entre la UE y los estados de Mercosur. Las negociaciones para este acuerdo comenzaron en 1999.
