Un estudio reciente sugiere que los niños que siguen una dieta vegetariana tienden a ser más bajos en estatura, pero presentan un menor riesgo de obesidad. La investigación, publicada por De Standaard, indica que, si bien la altura promedio de los niños vegetarianos puede ser ligeramente inferior, los beneficios en cuanto al peso y la salud metabólica son significativos.
Los hallazgos sugieren que una alimentación basada en plantas podría contribuir a un mejor control del peso en la infancia, lo que a su vez podría reducir el riesgo de desarrollar problemas de salud asociados a la obesidad en el futuro. Es importante destacar que el estudio no profundiza en las razones específicas de esta diferencia de estatura, ni en los posibles factores nutricionales que podrían estar involucrados.
