Los días más cortos, la reducción de la actividad física, los excesos alimenticios durante las fiestas y la tendencia natural a desear alimentos calientes y densos en calorías pueden hacer que perder grasa parezca una tarea difícil. Sin embargo, investigaciones sugieren que el invierno puede ofrecer ciertas ventajas metabólicas para el control de peso cuando se aborda de la manera correcta. Para los adultos, alinear las elecciones dietéticas con la disponibilidad estacional no solo puede hacer posible la pérdida de peso en invierno, sino también más sostenible. A continuación, se presentan alimentos de temporada de invierno que pueden apoyar la quema de grasa y una pérdida de peso saludable.
Alimentos de temporada que pueden apoyar la pérdida de peso en invierno
1. Zanahorias
Las zanahorias de invierno son naturalmente más dulces y ricas en fibra dietética y betacaroteno. Investigaciones demuestran que los vegetales ricos en fibra promueven la saciedad y reducen la ingesta calórica total. Las zanahorias tienen una baja carga glucémica, lo que significa que no elevan los niveles de azúcar en sangre, un factor clave en el almacenamiento de grasa.
2. Fenogreco (Methi)
El fenogreco se utiliza ampliamente en la cocina india de invierno y existe evidencia sólida que respalda su papel en la regulación del azúcar en sangre y el control del apetito. Estudios muestran que la fibra de fenogreco mejora la sensibilidad a la insulina, lo cual es crucial para la pérdida de grasa.
3. Berza (Mustard Greens)
La berza es un alimento básico de invierno rica en antioxidantes, vitamina K y compuestos vegetales que apoyan la salud metabólica. Las verduras de hoja verde se asocian con porcentajes más bajos de grasa corporal debido a su baja densidad calórica y su alto contenido de nutrientes.
4. Batatas (Sweet Potatoes)
Contrariamente a la creencia popular, las batatas pueden apoyar la pérdida de peso cuando se consumen con moderación. Investigaciones muestran que el almidón resistente y la fibra mejoran la sensibilidad a la insulina y la salud intestinal. La mejor manera de consumirlas es hervidas o asadas sin añadir azúcar ni mantequilla.
5. Cacahuates (Peanuts)
Los cacahuates se cosechan en invierno y son ricos en proteínas, grasas saludables y fibra. Estudios sugieren que los frutos secos no contribuyen al aumento de peso cuando se consumen en porciones controladas e incluso pueden mejorar la oxidación de grasas. La combinación de proteínas y grasas aumenta la saciedad y reduce los atracones.
6. Guayaba
La guayaba es una fruta de invierno cargada de vitamina C y fibra. Investigaciones relacionan los altos niveles de vitamina C con una mejor oxidación de grasas durante la actividad física. Apoya el metabolismo y mejora la digestión, lo que juega un papel en la regulación del peso.
7. Rábano
El rábano es bajo en calorías y rico en contenido de agua y fibra. Estudios muestran que los vegetales ricos en agua aumentan la sensación de saciedad al tiempo que reducen la ingesta total de energía. Promueve la saciedad sin añadir calorías excesivas.
8. Jengibre
El jengibre tiene propiedades termogénicas, lo que significa que aumenta ligeramente la temperatura corporal y el gasto calórico. Las investigaciones indican que la suplementación con jengibre puede reducir el peso corporal, la relación cintura-cadera y la resistencia a la insulina.
9. Cúrcuma
La curcumina, el compuesto activo de la cúrcuma, ha sido estudiada por su papel en la reducción de la inflamación y la mejora de la salud metabólica. La inflamación crónica está estrechamente relacionada con la obesidad y la dificultad para perder grasa. Reducir la inflamación apoya un mejor metabolismo de las grasas y la sensibilidad a la insulina.
10. Cítricos
Los cítricos de invierno son ricos en vitamina C y flavonoides que apoyan la oxidación de grasas. Estudios sugieren que las personas con niveles adecuados de vitamina C queman más grasa durante el ejercicio moderado en comparación con aquellas que son deficientes. Mejora la eficiencia de la quema de grasas y apoya la salud inmunológica durante el invierno.
Los alimentos de temporada están naturalmente alineados con las necesidades nutricionales del cuerpo durante condiciones climáticas específicas. Los productos de invierno tienden a ser más ricos en fibra, antioxidantes y compuestos calentadores que apoyan la digestión y el metabolismo. Las investigaciones también muestran que comer de temporada mejora la calidad de la dieta y reduce la dependencia de los alimentos ultraprocesados, una de las mayores barreras para la pérdida de peso.
La pérdida de peso en invierno no requiere dietas extremas. Combinar alimentos de temporada con comidas regulares, una ingesta adecuada de proteínas, movimiento diario (incluyendo ejercicios en interiores o caminar), buen descanso y manejo del estrés es mucho más efectivo que los planes restrictivos. Las personas con trastornos de la tiroides, diabetes u otras afecciones metabólicas deben buscar asesoramiento médico personalizado antes de realizar cambios importantes en la dieta.
Descargo de responsabilidad: Este contenido, incluyendo consejos, proporciona información genérica únicamente. No es de ninguna manera un sustituto de una opinión médica calificada. Siempre consulte a un especialista o a su médico para obtener más información. NDTV no se hace responsable de esta información.
Referencias
Cold Exposure and Energy Expenditure – National Institutes of Health (NIH), 2014
Dietary Fibre and Satiety Mechanisms – National Center for Biotechnology Information (NCBI), 2015
Fenugreek and Glycaemic Control – NCBI, 2016
Leafy Green Vegetable Intake and Obesity Risk – NCBI, 2018
Resistant Starch and Insulin Sensitivity – NIH, 2012
Nut Consumption and Weight Management – NCBI, 2015
Vitamin C Status and Fat Oxidation – NIH, 2005
Ginger Supplementation and Weight Reduction – NCBI, 2019
Curcumin and Metabolic Health – NCBI, 2017
Water-Dense Foods and Energy Intake – Centers for Disease Control and Prevention (CDC), 2016
