Con la nieve ya presente en gran parte de New Hampshire, y más pronosticada, los cardiólogos advierten que palear nieve puede ejercer una presión adicional sobre el corazón.
“Al palear nieve, la mayoría de las personas tienden a contener la respiración inconscientemente”, explicó el Dr. Patrick Magnus, director clínico asociado y director médico del Cardiovascular Institute en Concord Hospital.
Esta acción, combinada con el esfuerzo de levantar cargas pesadas de nieve, puede provocar un aumento repentino del ritmo cardíaco y la presión arterial, incrementando el riesgo de un ataque cardíaco u otros problemas, según Magnus.
Investigaciones de la American Heart Association revelaron que palear nieve es una de las actividades que puede someter al corazón a un estrés adicional, especialmente en personas que no hacen ejercicio regularmente.
“Las personas tienden a pasar mucho tiempo de pie, lo que provoca que la sangre se acumule en las piernas, reduciendo el retorno de sangre al corazón”, señaló Magnus.
Además, la exposición al aire frío “provoca la constricción de los vasos sanguíneos”, lo que eleva la presión arterial, añadió Magnus.
“Por lo tanto, al combinar todos estos factores – el ejercicio estático, el esfuerzo, la exposición al aire frío – se le está pidiendo al corazón que trabaje mucho en condiciones a las que generalmente no estamos acostumbrados durante períodos prolongados”, explicó Magnus.
Magnus recomienda que las personas con afecciones cardíacas o que ya tienen riesgo de sufrir un ataque cardíaco eviten palear nieve si es posible.
“Pero en general”, dijo, “si va a palear nieve, debe comenzar gradualmente. Tómese su tiempo, caliente, estire y, a veces, haga una caminata rápida antes de comenzar siquiera”.
Magnus también recomienda empujar la nieve en lugar de levantarla y lanzarla. La American Heart Association ofrece recursos adicionales para la seguridad del corazón en climas fríos.
