El plan, largamente postergado, de TikTok para separarse de su matriz china, ByteDance, dio un paso adelante el jueves con el anuncio de la plataforma de videos sobre un acuerdo de adquisición liderado por Oracle Corp.
Shou Chew, director ejecutivo de TikTok, informó a sus empleados que la compañía y ByteDance han firmado acuerdos vinculantes para crear una empresa conjunta en Estados Unidos, con una participación mayoritaria de inversionistas estadounidenses, según un memorando interno al que tuvo acceso Bloomberg.
Chew expresó su satisfacción por el acuerdo, que involucra a Oracle, Silver Lake Management y MGX. Se prevé que el cierre de la transacción se concrete el 22 de enero de 2026, aunque aún quedan detalles por resolver.
Hasta el momento, los reguladores chinos no han emitido una postura sobre la aprobación de la operación.
¿Cómo operará TikTok en EE.UU. tras el acuerdo?
Una vez completada la transacción, la nueva empresa conjunta estadounidense operará de forma independiente, asumiendo el control de la protección de datos, la moderación de contenidos y la seguridad de los algoritmos dentro del país, según lo indicado por Chew en el memorando.
La entidad también estará gobernada por una junta directiva de siete miembros, con una mayoría de representantes estadounidenses. Las acciones de Oracle experimentaron un aumento de alrededor del 5.2 por ciento en las primeras operaciones del viernes, previo a la apertura de los mercados.
El memorando describe un acuerdo que se alinea con lo anunciado por la Casa Blanca en septiembre, el cual estaba pendiente de la aprobación china y valoraba las operaciones de TikTok en Estados Unidos en aproximadamente 14 mil millones de dólares.
El documento de Chew no especifica la posición de China respecto a la transacción, que implicará la transferencia de parte, aunque no la totalidad, del control de TikTok US a ByteDance.
¿Cómo se dividirá TikTok en Estados Unidos?
De acuerdo con los términos del acuerdo, el 50 por ciento de los inversionistas en TikTok US serán nuevos: Oracle, Silver Lake y MGX, una firma de inversión con sede en Abu Dabi, adquirirán cada uno un 15 por ciento de la propiedad. Un 30.1 por ciento quedará en manos de filiales de inversionistas existentes de ByteDance, mientras que el 19.9 por ciento restante permanecerá en manos de ByteDance.
Los términos del acuerdo sugieren que ByteDance podría mantener la supervisión de aspectos clave de TikTok US, una aplicación utilizada por cerca de la mitad de la población estadounidense.
Bloomberg News informó previamente que ByteDance retendría alrededor del 50 por ciento de las ganancias generadas por las operaciones de TikTok en Estados Unidos.
La participación de ByteDance ha sido un punto de fricción constante en las negociaciones, llevando a críticos, incluso dentro del partido del expresidente Donald Trump, a cuestionar la viabilidad legal del acuerdo propuesto por la Casa Blanca.
La ley de seguridad nacional, aprobada y firmada durante el mandato del expresidente Joe Biden, establece que TikTok US y ByteDance no podrán tener una relación operativa.
Los algoritmos de contenido de ByteDance se consideran fundamentales para el éxito de TikTok. Según la propuesta de la Casa Blanca, ByteDance licenciará su tecnología de recomendación de inteligencia artificial a la nueva entidad estadounidense, la cual utilizará el algoritmo existente para entrenar un nuevo sistema con datos estadounidenses protegidos por Oracle, el socio en la nube de la plataforma.
El papel de Oracle como garante de la seguridad de los datos también ha generado inquietudes. Este acuerdo se basa en una colaboración previa entre TikTok y Oracle, que se planteó hace años al gobierno estadounidense para abordar preocupaciones similares sobre la propiedad china de la aplicación. Dicha colaboración, conocida como Proyecto Texas, fue rechazada por el gobierno estadounidense por considerarse insuficiente para resolver los problemas de seguridad nacional.
De concretarse, el acuerdo podría aliviar las tensiones persistentes entre Beijing y Washington, y representar un avance en las negociaciones más amplias entre ambos países, que mantienen disputas en materia de comercio y otros temas.
