La Corte Penal Internacional (CPI) rechazó el recurso presentado por Israel contra la investigación sobre la guerra en Gaza. Según un documento de la corte, tampoco se suspenden las órdenes de arresto contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y el exministro de Defensa Yoav Gallant, lo que permitiría continuar con la investigación de posibles crímenes de guerra cometidos en la Franja de Gaza.
Israel había argumentado que, tras el 7 de octubre de 2023, se había presentado una “nueva situación”. El procedimiento está pendiente ante la CPI desde mayo de 2018, cuando la parte palestina remitió al tribunal una investigación sobre “crímenes pasados, presentes y futuros”. En marzo de 2021, la fiscalía abrió formalmente la investigación.
Los jueces aclararon que el tribunal ya está investigando desde 2021 los conflictos armados en los territorios de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este entre actores estatales israelíes y grupos armados palestinos. Los hechos investigados después del 7 de octubre entran en el mismo marco legal y fáctico. Por lo tanto, los jueces no hicieron lugar a la argumentación israelí.
Críticas contundentes desde Israel
El gobierno israelí criticó la decisión. Oren Marmorstein, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, escribió en X que la decisión es otro ejemplo de la creciente politización de la CPI. Acusó al tribunal de violar flagrantemente los derechos de soberanía de los Estados no miembros. “Así es como se ve la política disfrazada de ‘derecho internacional’”, afirmó Marmorstein.
Israel no reconoce al tribunal de La Haya y niega su jurisdicción. Al mismo tiempo, el gobierno argumenta que la acción militar en la Franja de Gaza para liberar a los rehenes y desmantelar a la organización terrorista Hamás es conforme al derecho internacional. (KNA)
