El joven bailarín Leo, de tan solo 15 años, ha logrado un gran éxito en el mundo de la danza clásica. Recientemente, fue uno de los 86 bailarines seleccionados de un total de 445 participantes para competir en el prestigioso Prix de Lausanne, una competencia internacional que busca talentos prometedores.
Sin embargo, la carrera de Leo podría tomar una pausa temporal. A pesar de recibir una oferta de contrato de dos años con el Birmingham Royal Ballet, una de las cinco compañías de ballet más importantes del Reino Unido, el mismo día se le notificó que debía cumplir con el servicio nacional.
Según le aconsejaron directores del sector, es preferible que complete el servicio nacional ahora, ya que una interrupción más adelante en su carrera podría ser más perjudicial. “Estaba en Suiza cuando hablamos del servicio nacional, y al principio me sentí un poco decepcionado. Veía a mis compañeros unirse a compañías y algunos ya estaban bailando roles de solista, mientras que yo tenía que regresar para cumplir con el servicio. Pero luego intenté ser positivo y me sentí mejor. Creo que puedo manejarlo”, comentó Leo.
Su padre expresó su preocupación por el impacto que esta pausa podría tener en su desarrollo: “Su técnica y memoria muscular podrían debilitarse. Como bailarín, tiene que entrenar todos los días para mantener su fuerza y perfeccionar su técnica”.
En septiembre, Leo ganó el único Gran Premio otorgado en la región Asia-Pacífico en el Youth America Grand Prix (YAGP) Manila, lo que le valió una invitación a las Finales Globales del YAGP en Estados Unidos en mayo del próximo año. No obstante, ya habrá comenzado su servicio nacional el 5 de enero.
A pesar de esto, Leo se mantiene optimista. Su objetivo es unirse a una compañía de ballet más grande en Europa en el futuro, pero solo después de completar su servicio nacional. “No puedo terminar el servicio nacional y esperar ser un bailarín de primer nivel de inmediato. Por supuesto, será más difícil, tendré que seguir entrenando durante los dos años de servicio”, afirmó.
Aunque sus padres son taiwaneses, Leo considera el servicio nacional como una parte importante de su vida que desea cumplir. “Crecí en Singapur, por lo que tengo un sentido de pertenencia aquí. Todo mi entrenamiento en ballet proviene de Singapur, y eso es lo que me ha permitido destacar en otros países y ganar tantas competencias en el extranjero. Por eso aprecio tanto a Singapur, es parte de mí y por eso estoy dispuesto a servir a mi país a través del servicio nacional”, explicó.
Puedes encontrar más información sobre el camino de Leo en la danza en el episodio de Real Talk No Filter a continuación.
