En 2015, casi 200 naciones, incluyendo Estados Unidos, firmaron un tratado legalmente vinculante conocido como el Acuerdo de París. El objetivo principal de este acuerdo era establecer compromisos para limitar el aumento de la temperatura global.
La pregunta sobre si Donald Trump debió retirar a Estados Unidos de este acuerdo sigue siendo objeto de debate. La decisión de Trump, anunciada en 2017, generó controversia a nivel internacional, con críticas por parte de líderes mundiales y organizaciones ambientales.
El Acuerdo de París busca mantener el aumento de la temperatura media global muy por debajo de los 2 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, y proseguir los esfuerzos para limitar ese aumento a 1,5 grados Celsius. Los países firmantes se comprometieron a establecer y actualizar periódicamente sus contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC), que representan sus esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
