Anchorage, Alaska – El Fiscal General de Alaska, Stephen J. Cox, anunció el 23 de diciembre de 2025 la creación de una nueva beca bajo la dirección del Procurador General del Estado. Esta beca, denominada en honor al Juez Andrew J. Kleinfeld, ofrecerá a jóvenes abogados de destacado perfil una vía directa para servir al Estado de Alaska.
La Beca Kleinfeld está diseñada para atraer a recién graduados de prácticas en tribunales de apelación –preferiblemente de la Corte Suprema de Alaska, el Noveno Circuito o de otros circuitos federales– que deseen servir al Estado de Alaska y adquirir una valiosa experiencia en materia de apelaciones. Esta beca complementará el actual Programa de Becas de la División Civil, que brinda a graduados en derecho y a practicantes recientes la oportunidad de conocer el diverso trabajo legal de la división, al aprovechar una de las posiciones de becas existentes del Departamento para este rol centrado en apelaciones.
El Fiscal General Cox describió la nueva beca como “una forma de honrar la perdurable influencia del Juez Kleinfeld en Alaska y en la nación. La devoción del Juez Kleinfeld al estado de derecho solo era comparable a su amor por Alaska y por su familia. Su brillante, pero austero estilo de redacción subrayaba su sentido común y su fidelidad a las palabras de la Constitución, las leyes de nuestra nación y las leyes de nuestro Estado. El sistema de justicia de Alaska ha sido inmensamente beneficiado por el largo servicio judicial del Juez Kleinfeld, y quizás esta beca eventualmente descubra al próximo Juez Kleinfeld.”
La historia de Andrew J. Kleinfeld en Alaska comenzó mucho antes de sus nombramientos en tribunales federales. Después de obtener su título de abogado en Harvard, dejó la costa este en 1969, atraído por el vasto horizonte de Alaska. Fue secretario judicial del Juez Jay Rabinowitz de la Corte Suprema de Alaska, una decisión que tomó después de leer docenas de opiniones de la Corte Suprema de Alaska y verse impresionado por la apasionada defensa de la libertad de expresión del Juez Rabinowitz. Así comenzó un amor de por vida por Alaska y por la ley. Después de su secretariado, el Juez Kleinfeld abrió un bufete de abogados en Fairbanks, se estableció en una cabaña de troncos al norte de la ciudad, animó la carrera de trineos Yukon Quest desde su porche y convirtió a Alaska en su hogar. Durante el siguiente medio siglo, él y su esposa Judith Kleinfeld criaron a tres hijos y a muchos, muchos perros.
El primer cargo judicial del Juez Kleinfeld llegó cuando tenía poco más de 20 años: sirvió a tiempo parcial como Magistrado de los Estados Unidos para el Distrito de Alaska de 1971 a 1974. Su reputación de este temprano servicio judicial y años de ejercicio privado fue, en una palabra, estelar. Como era de esperar, el Presidente Ronald Reagan lo nombró para el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para Alaska en 1986. Luego, el Presidente George H.W. Bush lo elevó al Noveno Circuito en 1991, donde continuó trabajando desde Fairbanks.
Conocido por escribir de forma sencilla, hablar con elocuencia y tener pasión por la tutoría de sus secretarios judiciales –que primero debían leer el ensayo de Orwell “Política y el Lenguaje Inglés” antes de comenzar sus prácticas– el Juez Kleinfeld dejó una huella distintiva en la ley y en toda la comunidad legal.
El Senador de los Estados Unidos, Dan Sullivan –un ex Fiscal General de Alaska que fue secretario judicial del Juez Kleinfeld– ha reconocido desde hace tiempo que la tutoría del Juez moldeó su propia carrera en el servicio público. “El Juez Kleinfeld fue un gigante legal y uno de los jueces más consecuentes en la relativamente joven historia de Alaska. Habiendo sido secretario judicial del Juez Kleinfeld hace casi 30 años en sus cámaras de Fairbanks, puedo dar fe de su profundo respeto por el estado de derecho, su amor por el procedimiento y su dedicación al servicio público. Aprendí mucho de este gran alaskano. No puedo pensar en un nombre más apropiado para esta prestigiosa nueva beca. Quiero agradecer al Fiscal General Cox por reconocer el importante legado del Juez Kleinfeld, y espero ver a todos los destacados becarios que seguirán los pasos del Juez Kleinfeld.”
Los becarios Kleinfeld trabajarán directamente bajo la dirección del Procurador General del Estado, asistiendo en la defensa de apelaciones ante tribunales de apelación dentro y fuera de Alaska. Se encargarán de casos relacionados con la interpretación de leyes y la Constitución, el federalismo, la separación de poderes, el derecho penal y los intereses soberanos del Estado. La oficina hará todos los esfuerzos posibles para brindar oportunidades de argumentación oral, dependiendo del volumen de casos y la disponibilidad.
La beca será práctica desde el primer día. Los becarios analizarán casos reales, contribuirán a la preparación de argumentos orales (con la posibilidad de argumentar en casos apropiados) y recibirán una estrecha tutoría del Procurador General, los Procuradores Adjuntos Civiles y Penales, y otros abogados de apelaciones de alto nivel. Como el Juez Kleinfeld, aprenderán a escribir con claridad, pensar con precisión y argumentar solo lo que el texto pueda soportar.
Proceso de Solicitud
Elegibilidad. Los solicitantes deben estar terminando o haber completado recientemente una práctica en un tribunal de apelación –idealmente de la Corte Suprema de Alaska, el Noveno Circuito o de otro tribunal de apelaciones federal– y deben demostrar un interés genuino en ejercer en Alaska y un fuerte compromiso con el servicio público. En el espíritu del enfoque del Juez Kleinfeld para contratar secretarios judiciales, el Departamento busca abogados de alta inteligencia y amplia formación académica, con una sólida formación en historia, economía, ciencia política, literatura y ciencias. La beca está abierta a graduados de todas las facultades de derecho; la capacidad, no el linaje, es lo que más importa. Se espera que los becarios escriban y hablen con claridad sobre temas complejos, aborden la ley con honestidad intelectual y aporten la amabilidad que hace que el trabajo en equipo sea agradable. Los becarios deben estar autorizados o dispuestos a obtener la licencia para ejercer en Alaska.
Plazo y Estructura. La beca tendrá una duración de 24 meses, con una combinación de práctica de apelaciones civiles y penales. Los becarios trabajarán bajo la supervisión del Procurador General.
Proceso de Solicitud. Los solicitantes deben incluir un currículum vitae, un expediente académico de la facultad de derecho, dos cartas de recomendación –preferiblemente incluyendo una de un juez– o dos cartas de recomendación y una referencia adicional de un juez, una muestra de escritura sin editar y una breve carta que describa su interés en Alaska y en los principios encarnados por el Juez Kleinfeld: una defensa clara y elocuente y argumentos basados en leyes y la Constitución. Los materiales de solicitud se pueden enviar por correo electrónico a Kleinfeld.Fellowship@alaska.gov.
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Contactos de Prensa del Departamento: Directora de Comunicaciones Patty Sullivan en patty.sullivan@alaska.gov o (907) 269-6368. Oficial de Información Sam Curtis en sam.curtis@alaska.gov o (907) 269-6269.
