El principal desafío regulatorio en el ámbito de las criptomonedas reside actualmente en asegurar la interoperabilidad entre las normativas de diferentes jurisdicciones, evitando así la fragmentación de un mercado inherentemente global.
Dos aspectos regulatorios sobre las stablecoins generan particular controversia: el pago de intereses a sus tenedores y la emisión múltiple en diversas jurisdicciones. En Estados Unidos, la legislación ha recibido críticas por parte del sector bancario al no extender la prohibición de pago de intereses a los intermediarios de distribución –como plataformas de intercambio o custodios–, una posible “laguna legal” que podría aumentar el riesgo de que las stablecoins sustituyan a los depósitos bancarios. Por el contrario, la regulación MiCA establece una prohibición más clara al respecto.
La legislación estadounidense ha sido criticada por no extender la prohibición de pago de intereses a los intermediarios de distribución.
La emisión múltiple se define como el mecanismo por el cual entidades de diferentes jurisdicciones pueden emitir stablecoins idénticas y fungibles, aunque sujetas a distintos regímenes regulatorios y respaldadas por reservas de activos separadas. Si bien MiCA no regula explícitamente esta práctica, su uso en el mercado ha provocado un intenso debate entre las instituciones europeas sobre los riesgos potenciales para los consumidores, relacionados con la posible insuficiencia de reservas para cubrir la circulación de las stablecoins y la incertidumbre sobre si el marco MiCA actual ofrece las salvaguardias necesarias. Este debate pone de manifiesto la importancia de la interoperabilidad entre los diferentes marcos regulatorios y la necesidad de una convergencia internacional. Mientras que la Genius Act contempla acuerdos de reciprocidad para emisores extranjeros que cumplan con una supervisión equivalente, MiCA no prevé este tipo de reconocimiento, por lo que la emisión múltiple se presenta como la única vía posible para la interoperabilidad.
Con el objetivo de abordar este debate, se espera que la Comisión Europea publique una guía que aclare el tratamiento de los esquemas de emisión múltiple bajo MiCA, facilitando así la supervisión por parte de las autoridades competentes. A futuro, el reglamento ya anticipa sus propias limitaciones e incluye un mandato para que la Comisión Europea presente un informe sobre aquellos aspectos que quedan fuera del ámbito de aplicación de MiCA, como las Finanzas Descentralizadas (DeFi), la concesión de préstamos y los NFTs no regulados.
Se espera que la Comisión Europea emita una guía para aclarar el tratamiento de los esquemas de emisión múltiple bajo MiCA y así ayudar a las autoridades en su supervisión.
En espera de una mayor claridad sobre estos temas pendientes en MiCA, la prioridad para las jurisdicciones debe ser buscar la interoperabilidad entre sus marcos regulatorios, con el fin de mitigar la fragmentación y garantizar que la legislación pueda adaptarse al ritmo de evolución de los mercados y a su escala global.
