La investigación sobre el trágico asesinato de Rob Reiner, el aclamado director de películas como “Cuando Harry conoció a Sally”, y su esposa, la fotógrafa Michele Reiner, ha revelado que su hijo, Nick Reiner, de 32 años, había sido medicado previamente para la esquizofrenia, según fuentes cercanas a la investigación.
Aunque se desconoce el nombre específico del medicamento y la duración del tratamiento, esta información surge en un momento en que las autoridades aún no han determinado un motivo claro para el fatal ataque ocurrido el 14 de diciembre. Nick Reiner enfrenta cargos por dos cargos de asesinato y podría recibir cadena perpetua o la pena de muerte si es declarado culpable.
Durante su primera aparición ante el tribunal el miércoles, Reiner vestía una bata azul utilizada para prevenir el suicidio, lo que sugiere un riesgo de autolesión. El juez accedió a la solicitud de su abogado, Alan Jackson, de posponer su declaración de culpabilidad hasta el 7 de enero.
La historia de Nick Reiner ha estado marcada por una larga batalla contra la adicción. En entrevistas pasadas, reveló su lucha contra la heroína desde la adolescencia, con múltiples ingresos y salidas de centros de rehabilitación, e incluso períodos de indigencia.
Amigos de la familia han comentado que Nick Reiner enfrentó desafíos de salud mental durante años, y que sus padres se esforzaron incansablemente por brindarle ayuda. Se desconoce el papel que la medicación y sus problemas de adicción jugarán en el desarrollo del caso.
El fiscal del condado de Los Ángeles, Nathan Hochman, indicó que aún no se ha tomado una decisión sobre si buscarán la pena capital en este caso, un proceso que normalmente lleva meses.
En 2015, Nick Reiner logró superar su adicción y coescribió el guion de “Being Charlie”, una película dirigida por su padre, Rob Reiner, que aborda la temática de la adicción a las drogas. En ese momento, Nick elogió a sus padres por su apoyo en su camino hacia la sobriedad, aunque también expresó sentimientos de culpa por haberlos decepcionado.
Según la información proporcionada por las autoridades, Nick Reiner habría apuñalado fatalmente a sus padres en la madrugada del 14 de diciembre. Sus cuerpos fueron encontrados alrededor de las 3:40 p.m. en el dormitorio principal de su hogar.
La macabra escena fue descubierta por Romy Reiner, la hija de la pareja, de 27 años, quien fue alertada por una masajista que no recibió respuesta al llegar a la casa. Romy llamó al 911 para solicitar ayuda.
La oficina del médico forense del condado de Los Ángeles confirmó que las muertes fueron causadas por “múltiples heridas punzocortantes”.
En una entrevista en 2015, Rob Reiner expresó su arrepentimiento por haber priorizado el consejo de profesionales sobre la opinión de su hijo durante su tratamiento de rehabilitación. Michele Reiner también admitió que se dejaron influenciar por los profesionales, quienes les hicieron creer que Nick mentía y manipulaba.
Un amigo de la familia declaró que Rob y Michele “hicieron todo lo posible por Nick, invirtiendo en cada programa de tratamiento y sesión de terapia, y sacrificando sus propias vidas para intentar salvarlo repetidamente”.
