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Publicado el 24/12/2025 – 14:33 UTC+1 • Actualizado a las 14:38
A raíz de interrupciones masivas en WhatsApp en toda Rusia a finales de diciembre, la red social, propiedad de Meta, emitió un comunicado acusando a las autoridades rusas de intentar privar a los usuarios de sus comunicaciones privadas.
“Obligar a la gente a utilizar aplicaciones menos seguras, impuestas por el Estado, reduce la seguridad digital de los ciudadanos“, declaró WhatsApp.
Según representantes del servicio, las acciones de las autoridades rusas tienen como objetivo “privar a más de 100 millones de personas del derecho a la correspondencia privada“.
La empresa subraya que WhatsApp ha sido parte de la vida cotidiana de los rusos durante mucho tiempo, ya sea para conversaciones escolares, grupos de trabajo o correspondencia familiar.
Restricciones, ralentizaciones y amenaza de bloqueo total
La situación se agravó a partir de agosto de 2025, cuando Roskomnadzor, el organismo ruso de supervisión de los medios y las comunicaciones, comenzó a bloquear las llamadas de voz y vídeo en WhatsApp y Telegram, explicando que se trataba de “luchar contra el fraude“.
En diciembre, el regulador intensificó la presión: según expertos, la velocidad de WhatsApp en Rusia se redujo entre un 70 y un 80%, y el envío de archivos multimedia se volvió casi imposible.
Roskomnadzor afirma que la mensajería se utiliza para la organización de ataques terroristas, el reclutamiento y el fraude, y advirtió que, si la empresa no cumple con la legislación rusa, el servicio será bloqueado por completo.
Estas ralentizaciones suelen ser un paso previo al bloqueo total, algo que ya ha ocurrido con otras plataformas extranjeras que ya no están disponibles en Rusia.
Recurso colectivo contra Roskomnadzor
En este contexto de restricciones, un grupo de 42 usuarios de WhatsApp y Telegram ha presentado una demanda colectiva contra Roskomnadzor y el Ministerio de Desarrollo Digital. Así lo informaron los medios rusos.
Los demandantes argumentan que las acciones de la autoridad reguladora violan sus derechos constitucionales, incluida la libertad de recibir y difundir información, la libertad de expresión y la libertad de asociación.
La demanda cita datos del Banco Central de Rusia: los principales canales de fraude siguen siendo las llamadas telefónicas convencionales y los SMS, no las aplicaciones de mensajería.
La denuncia fue presentada ante el tribunal del distrito de Tagansky en Moscú, pero las agencias no han comentado la situación.
MAX, la alternativa rusa pública a WhatsApp
Las restricciones impuestas a WhatsApp van acompañadas de una promoción activa de la aplicación de mensajería estatal rusa MAX, lanzada a principios de 2025. La aplicación ya ha sido criticada por sus vulnerabilidades y su mala protección de datos, pero las autoridades siguen recomendándola como una “alternativa segura“.
Al mismo tiempo, Snapchat, Facebook, Instagram y YouTube están sujetos a restricciones o están bloqueados en Rusia; WhatsApp sigue siendo uno de los últimos grandes servicios occidentales disponibles sin un bloqueo completo.
Retrasos, fallos y mensajes perdidos
La ralentización de WhatsApp se está notando no solo en Rusia, sino también en el extranjero. Marina O., residente de Lyon, relata: “Recibí un SMS normal de Moscú cinco horas después de enviarlo. Primero pensé que era un problema con mi teléfono, pero luego supe que muchas personas estaban experimentando retrasos similares“.
Quejas similares están apareciendo masivamente en las redes sociales: los mensajes se congelan, los archivos multimedia no se cargan, las llamadas no se completan.
Moscú invoca un aumento de la ciberdelincuencia en WhatsApp
A finales de noviembre, las autoridades rusas indicaron que estaban considerando abandonar WhatsApp. El jefe del comité de la Duma encargado de la política de la información, Sergei Boyarsky, declaró que el trabajo de sustitución de la mensajería estaba avanzando rápidamente gracias al desarrollo de la plataforma pública MAX**.** Según él, WhatsApp “no ha intentado establecer una interacción con los reguladores” y, por lo tanto, como dijo el diputado, “no hay razón para seguir complaciendo a la estadounidense Meta y a su servicio“.
Al mismo tiempo, Roskomnadzor acusó nuevamente a WhatsApp de infringir la legislación rusa y sugirió la posibilidad de un bloqueo completo en caso de una nueva infracción. La agencia recomendó a los ciudadanos que pasaran a los servicios nacionales.
Las autoridades también se han alarmado por el aumento de la ciberdelincuencia: según el diputado Anton Nemkin, el número de ataques contra los usuarios de WhatsApp se ha multiplicado por 3,5 durante el año, miles de cuentas han sido pirateadas y se han creado “clones” de cuentas, lo que ha permitido a los estafadores defraudar dinero.
Estas acusaciones fueron el primer indicio de que la presión sobre WhatsApp iba a intensificarse, lo que ocurrió en diciembre.
Roskomnadzor insiste en que WhatsApp debe poner sus actividades en conformidad con la legislación rusa. La empresa subraya que no tiene intención de abandonar el cifrado de extremo a extremo, un mecanismo clave para la protección de la correspondencia.
Los expertos estiman que la situación evoluciona según el escenario que ya condujo al bloqueo de otros servicios extranjeros. Si la presión se intensifica, WhatsApp podría ser el próximo objetivo.
