El miércoles, dos funcionarios israelíes dijeron a Reuters que durante las conversaciones en Egipto sobre un alto el fuego en Gaza, Israel acordó concesiones sobre el regreso de los palestinos al norte de la Franja de Gaza, pero cree que Hamás no quiere llegar a un acuerdo.
Los dos funcionarios familiarizados con las conversaciones dijeron que, según una propuesta de tregua de Estados Unidos, Israel permitiría que 150.000 palestinos regresaran al norte de Gaza sin controles de seguridad.
Agregaron que, a cambio, se pedirá a Hamás que proporcione una lista de los nombres de las mujeres, los ancianos y los rehenes enfermos que mantiene y que aún están vivos.
La oficina del primer ministro Benjamín Netanyahu declinó hacer comentarios.
Hamás dijo el martes que la última propuesta que recibió de los mediadores egipcios y qataríes no cumple con las demandas, pero la estudiará más profundamente antes de responder.
Los dos funcionarios dijeron que la evaluación israelí es que Hamás no quiere llegar a un acuerdo todavía.
El movimiento exige el fin del ataque militar israelí, la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza y permitir que los palestinos desplazados regresen a sus hogares.
El objetivo inmediato de Israel es asegurar la liberación de los rehenes tomados por Hamás en un ataque transfronterizo el 7 de octubre, y dice que no detendrá la guerra antes de poner fin al control de Hamás en Gaza y su capacidad de amenazar militarmente a Israel.
El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza anunció que el ataque israelí ha provocado hasta el momento la muerte de más de 33.000 palestinos, la mayor parte de la población de 2,3 millones de personas ha sido desplazada y vastas zonas de la Franja de Gaza han sido destruidas.
Israel retiró la mayor parte de sus fuerzas terrestres del sur de Gaza esta semana, después de meses de combates, pero aún dice que planea lanzar un ataque contra Rafah, donde ahora se encuentra más de la mitad de la población de Gaza.
Netanyahu dijo que los civiles serían evacuados de Rafah antes de que las fuerzas israelíes persiguieran a los miembros restantes de Hamás allí, pero esta promesa hizo poco para disipar la preocupación internacional.
La guerra comenzó cuando Hamas lanzó un ataque contra el sur de Israel, que según Israel mató a 1.200 personas y tomó 253 rehenes, alrededor de 130 de los cuales todavía están detenidos en Gaza.
