El refugio propuesto para los koalas en Australia se enfrenta a la amenaza de la tala

SYDNEY: Ubicado en viejos bosques de eucaliptos en la región australiana de Nueva Gales del Sur, se estima que el 15 por ciento de la menguante población de koalas del estado obtendrá cierta protección a partir de 2025, pero los ambientalistas dicen que podría ser demasiado tarde.

Para reforzar el hábitat de estos icónicos animales australianos, el gobierno estatal planea fusionar 315.000 ha (1.216 millas cuadradas) de parques nacionales y bosques públicos en el Parque Nacional del Gran Koala (GKNP), que abarca un área dos veces mayor que Londres.

Los ambientalistas y defensores de los bosques locales advierten que los mejores árboles para alimentar a los koalas podrían haber desaparecido cuando se amplíe el parque, a unos 500 kilómetros al norte de Sydney, debido al aumento de la tala de bosques nativos en el área.

“Ha habido una expansión e intensificación masiva de la tala en algunas de las áreas con mayor biodiversidad del Parque Nacional del Gran Koala”, dijo el defensor forestal local Mark Graham mientras estaba sentado en un tocón rodeado de árboles recién talados.

“El daño que se ha hecho aquí tomará mucho tiempo para repararse y, en algunos aspectos, es posible que nunca se repare”.

El koala fue clasificado como en peligro de extinción en Nueva Gales del Sur, Queensland y el Territorio de la Capital Australiana en 2022, y grupos ambientalistas estiman que los koalas podrían extinguirse en estado salvaje en Nueva Gales del Sur para 2050 si no se toman medidas.

Según cálculos de Reuters a partir de datos proporcionados por la Corporación Forestal del estado, la tala en los próximos seis meses dentro del GKNP podría aproximadamente triplicarse con respecto a los niveles observados en 2021-2022.

Los defensores y los grupos ambientalistas quieren que el estado prohíba la tala en todas las áreas propuestas del GKNP hasta que se finalicen los planes.

“No tiene sentido”, afirmó Stuart Blanch, científico conservacionista australiano del Fondo Mundial para la Naturaleza – Australia. “Deberían crear el Parque Nacional del Gran Koala y, mientras lo hacen, impedir que se talen estos árboles que alimentan a los koalas”.

La ministra de Medio Ambiente del estado, Penny Sharpe, dijo que el gobierno estaba tratando de implementar el GKNP lo antes posible, pero citó el compromiso de trabajar también con la comunidad y las industrias locales.

“No íbamos a detenernos, todos juntos, de inmediato, sin ningún plan sobre lo que sucederá con esas comunidades y sin una evaluación adecuada de los bosques”, dijo Sharpe.

El gobierno estatal dijo en septiembre que detuvo la tala en 106 centros de koalas en todos los bosques estatales del parque propuesto.

Estos centros, sin embargo, cubren menos del 5 por ciento de los bosques que se están evaluando para su inclusión en el parque de koalas.

James Jooste, director ejecutivo de la Asociación Australiana de Producciones Forestales de Nueva Gales del Sur, dijo que el área del parque propuesta es una región clave para la industria maderera.

“Podemos tener ambas cosas, una industria forestal nativa sostenible y un Parque Nacional del Gran Koala”, afirmó.