La nave espacial de SpaceX alcanza nuevas alturas en un monumental vuelo de prueba, pero se pierde en el reingreso

TEXAS— Un cohete SpaceX Starship se lanzó en su tercer vuelo de prueba desde las instalaciones de Starbase en Boca Chica, Texas, y logró múltiples hitos el jueves por la mañana antes de probablemente romperse.

El sistema de cohetes de espacio profundo pasó por una prueba de vuelo integrada de casi una hora de duración. Se esperaba que la nave espacial aterrizara en el Océano Índico al finalizar el vuelo, lo que dejaría al gigantesco vehículo en condiciones de pasar a vuelos de prueba más complejos y, eventualmente, llevar a los astronautas de la NASA a la superficie de la luna.

Pero después del reingreso, el equipo perdió dos piezas clave de comunicación al mismo tiempo: el contacto con Starlink, el servicio de Internet de SpaceX, y con el TDRSS, o Sistema de Seguimiento y Retransmisión de Datos por Satélite.

“El equipo ha informado que la nave se ha perdido, por lo que hoy no habrá amerizaje”, dijo Dan Huot, gerente de comunicaciones de SpaceX, durante la transmisión en vivo. “Pero, una vez más, es increíble ver cuánto hemos avanzado esta vez”.

SpaceX tampoco tuvo la intención de recuperar Starship después de esta prueba de vuelo. Se esperaba que la nave espacial realizara un aterrizaje forzoso. Y la nave espacial Starship logró volar mucho más lejos que durante dos pruebas anteriores en 2023.

La compañía habitualmente considera que las fallas durante estos primeros vuelos de prueba son normales. El objetivo de estas pruebas de vuelo es recopilar datos cruciales para que los ingenieros puedan regresar y modificar Starship, mejorándolo para futuras misiones.

El vehículo Starship, que incluye la nave espacial Starship superior y un cohete propulsor conocido como Super Heavy, despegó de las instalaciones privadas Starbase de SpaceX en Boca Chica, Texas, a las 8:25 am CT (9:25 am ET).

SpaceX considera que el sistema Starship es crucial para su misión fundacional: llevar humanos a Marte por primera vez. Y, lo que es más importante, la NASA ha elegido Starship como el vehículo de aterrizaje que transportará a sus astronautas a la superficie lunar en la misión Artemis III cuyo despegue está previsto para septiembre de 2026.

“¡Felicitaciones a SpaceX por un vuelo de prueba exitoso! Starship se ha elevado hacia los cielos. Juntos, estamos dando grandes pasos a través de Artemisa para devolver a la humanidad a la Luna y luego mirar hacia Marte”, escribió el administrador de la NASA, Bill Nelson, en X, antes conocido como Twitter.

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El propulsor Super Heavy, la primera etapa, o parte inferior, del vehículo de lanzamiento cobró vida y se elevó sobre el Golfo de México.

El propulsor Super Heavy quemó la mayor parte de su combustible y se separó de la nave espacial Starship, la etapa superior que se encuentra encima del Super Heavy.

Se esperaba que el propulsor realizara un aterrizaje autónomo y controlado en el océano, pero “no encendió todos los motores que esperábamos y lo perdimos”, dijo Huot.

SpaceX dijo que está trabajando para obtener un video de lo que ocurrió antes de que el propulsor impactara el agua. Pero el propulsor logró volar más lejos que un propulsor Super Heavy anteriormente. En los dos últimos vuelos, Super Heavy fue destruido en el aire antes de que tuviera la oportunidad de probar maniobras de aterrizaje.

Mientras tanto, la Administración Federal de Aviación investigará el “percance” que involucra tanto al propulsor Super Heavy como a la nave espacial Starship. La agencia otorga licencias para el lanzamiento de cohetes comerciales y supervisa las investigaciones de percances cuando una nave espacial se pierde durante el vuelo. Estas investigaciones son de rutina y se llevan a cabo independientemente de que SpaceX espere o no una pérdida del vehículo.

“Se produjo un percance durante la misión SpaceX Starship OFT-3 que se lanzó desde Boca Chica, Texas, el 14 de marzo”, según un comunicado emitido por la FAA. “No se han reportado heridos públicos ni daños a la propiedad pública. La FAA está supervisando la investigación de percances liderada por SpaceX para garantizar que la compañía cumpla con su plan de investigación de percances aprobado por la FAA y otros requisitos reglamentarios”.

El tercer vuelo de prueba se produjo en el 22º aniversario de SpaceX, según la transmisión en vivo.

El director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, ha dicho que el objetivo principal de estos primeros vuelos de prueba es llevar a Starship a velocidades orbitales, velocidades lo suficientemente rápidas como para permitir que la nave espacial entre en una órbita estable alrededor de la Tierra.

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Normalmente, tal hazaña requiere velocidades superiores a las 17.500 millas por hora (28.000 kilómetros por hora).

Starship alcanzó su objetivo de velocidades orbitales y no tenía como objetivo entrar en órbita en este vuelo.

Starship quemó su motor durante unos seis minutos antes de entrar en fase de inercia. La nave espacial realizó algunas pruebas clave y demostraciones tecnológicas.

En primer lugar, Starship alcanzó velocidades cercanas a las que se necesitarían para poner el vehículo en órbita. La puerta de carga útil de Starship, una escotilla que debe abrirse para que la nave espacial despliegue satélites en el espacio después de alcanzar la órbita, también se abrió antes de volver a sellarse en una prueba crucial de ese mecanismo.

SpaceX también llevó a cabo lo que la compañía llama una “demostración de transferencia de propulsor”. El objetivo era mover parte del propulsor a bordo del vehículo Starship de un tanque a otro, según un correo electrónico de diciembre de la NASA que explica la prueba.

Los ingenieros de SpaceX diseñaron esa demostración para comenzar a analizar cómo se repostará Starship en futuras misiones mientras esté en órbita.

El equipo “necesitará revisar algunos datos” tanto de la apertura de la puerta de carga útil como de la demostración de transferencia de propulsor para determinar el éxito de cada prueba, según la transmisión en vivo.

Sin embargo, después de alcanzar varios hitos, SpaceX reveló que optó por no intentar reencender los motores de Starship después de una fase de navegación de media hora que estaba originalmente planeada para la prueba de vuelo.

Starship estaba en una “trayectoria bastante empinada”, dijo Huot. Eso significaba que la gravedad de la Tierra probablemente arrastraría rápidamente a Starship de regreso a la Tierra, ya sea que se vuelvan a encender los motores o no.

No está claro por qué SpaceX decidió renunciar a esa prueba, pero los ingenieros notaron que es necesario evaluar muchos datos en las próximas horas y días.

“La atmósfera en realidad nos está haciendo un gran favor aquí al actuar como un sistema de frenado para las naves espaciales”, dijo Kate Tice, una de las presentadoras de la transmisión en vivo de SpaceX.

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La nave espacial Starship está recubierta con alrededor de 18.000 baldosas hexagonales de cerámica livianas diseñadas para proteger el vehículo de las temperaturas abrasadoras mientras se sumerge nuevamente en la atmósfera de la Tierra.

Durante la transmisión en vivo, se pudo ver brillando alrededor del vehículo un halo vibrante de plasma rojo brillante, creado por el calor y la presión extremos cuando Starship entró en la atmósfera.

Poco después, el equipo perdió comunicación con la nave espacial.

Completar el combustible de la nave espacial será fundamental para las misiones de alto perfil de Starship en el futuro.

Cuando Starship haga un viaje a la luna bajo el programa Artemis de la NASA, tendrá que permanecer en órbita cerca de la Tierra mientras SpaceX lanza vehículos separados que transportarán solo combustible a la nave espacial. Para llegar a la Luna, es posible que SpaceX tenga que realizar más de una docena de viajes para repostar combustible.

SpaceX recibió el miércoles la aprobación de los reguladores para realizar este último vuelo de prueba.

Musk ha dicho que tiene más confianza en que este vuelo tendrá éxito en comparación con los intentos de 2023. Un éxito podría brindarle a la compañía datos cruciales que podrían permitir a Starship pasar a vuelos de prueba más difíciles.

“No quiero maldecirlo, pero creo que la probabilidad de alcanzar la órbita es buena: 80%”, dijo durante una charla reciente publicada en las redes sociales. “Ciertamente, el tercer vuelo es un cohete mucho mejor que los vuelos uno o dos”.

Aún así, los funcionarios de SpaceX han dicho repetidamente que la compañía no espera una precisión del 100% en estos primeros vuelos de prueba.

“Cada una de estas pruebas de vuelo sigue siendo sólo eso: una prueba. No ocurren en un laboratorio o en un banco de pruebas, sino que colocan hardware de vuelo en un entorno de vuelo para maximizar el aprendizaje”, dijo la compañía en un comunicado publicado en su sitio web.

“Este rápido enfoque de desarrollo iterativo ha sido la base de todos los principales avances innovadores de SpaceX”. -CNN

2024-03-16 18:16:10
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